Siempre pensé que había una fórmula matemática de la vida, que si hacías algo, en cierto contexto, en ese preciso momento, el resultado sería certero, tal cual lo calculado.
Hoy me preguntaron si la vida era una mierda de frentón o si existía la posibilidad de vivir felíz sin escudarse en pseudosatisfactores de la necesidad de explicación que nos exige la mente, como las adoraciones religiosas o cosas por el estilo. Pienso que la vida es el presente y la felicidad, una actitud.
La soberbia es el resultado de ego sumado con éxito. Si logro eliminar al ego, puedo quedarme tan sólo con el éxito y para ello se requiere humildad.
La felicidad es la capacidad de vivir simplemente, entendiendo que cada sueño fue agluna vez tan solo un deseo. Cuando los deseos se cumplen, podemos confiar en que la vida es un sueño, hecho realidad.
Actitud.
El miedo reside en el ego.
El ego entorpece a la felicidad.
La vida es más simple, sólo hay presente y nuestra percepción.
A menos razón, más emoción. La emoción como motor de la acción.