Mucha gente, ¿te has quedado alguna vez mirando a un grupo de hormigas que siguen su camino religiosamente, una tras otra? eso es un poco lo que ocurre en la gran ciudad, aunque sabemos que también siempre una de esas hormigas se arranca y toma su priopio rumbo. Puedes optar, puedes encender la tv, ver los porgramas que te ofertan, sentir que tú eliges lo que ves, o bien puedes también, crear tu vida y tu día a día por tí mismo, en improvisación, en instinto. H0y paseé por providencia, vitrineé para saber qué es lo actual del comercio, de dónde salen esos monos pintarrajeados que veo en el camino o dónde compran sus pilchas las guapas mujeres que ocurren en el intertanto del camino a casa o al trabajo. Hay que decirlo, la gente está linda, sus gestos están más lindo, siento que andan más lento. O quizás soy yo, el que anda más lento y ahora con tiempo para mirarle las caras a las gentes. Pasé por el Drugstore de Providencia y me senté una media hora en la Contrapunto a leer unosd buenos libros de diseño de stands, composición de marcas, un poco de marketing para reinsertarme en el medio del que renegué por un par de años. Es mi entorno laboral y mientras lo sea, más me vale ser amigo de el que enemigo, de lo contrario, podría tropezar con algún día cualquiera de mi vida. Al salir, escuchando música en aleatorio en mi ipod, no pude dejar de detenerme en un local de emporio la rosa que hay ahí ahora. Pregunté: ¿qué es el chocolate araucano? para mi grata sorpresa, la niña respondió: Es chocolate elaborado con licor de araucano. Mi favorito. Probé uno y decidí que pasaría por otro alguna vez, con Bernardita quizás. Camino por calles aleatorias también, para intentar activar la creatividad, cambiar de camino o caminar sin rumbo suele funcionar. Estoy de vuelta en el trabajo y debo volver a laburar.
Paseo de hora de almuerzo, la ciudad.
D.
