¿sabes? si hay algo que he extrañado ultimamente es despertar en pichiquillaipe.
Así con frío, con agua helada en la ducha;
así contigo ofreciendo frutitas al desayuno, y miel por supuesto.
Así como cantando las canciones de sabina o de Drexler; o Chinoy, quizás.
Entonces me dí cuenta, que me queda lindo pichiquillaipe,
con el pelo volando cuando conduzco de vuelta,
con las alas abiertas cuando sueño despierto,
con la mente en blanco y el corazón dispuesto;
dispuesto a entregar todo lo que el sur me quiera dar.
Ahora quiero volar.
Mas los pasos con cuidado, no quiero tropezar;
pero tampoco dejar de andar.
Mas la vida con amor, no quiero que suframos;
pero tampoco dejar de volar.
Mas tus manos en las mías, no quiero amarrarte a mí;
pero tampoco volar sin tí.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Compartamos pensamientos, experiencias, visiones.